Una ruta diferente y solitaria para subir a un clásico andorrano. Esta vez hemos empezado desde la mina de hierro de Llorts, subiendo hacia las bordas de Ensegur, un entorno verde y tranquilo tras un día de lluvia.
Camino encantador y poco transitado que nos ha llevado hasta el Coll d'Arenes, punto de inicio de la trepada final hacia el Casamanya Nord (norte), pasamos por debajo del Casamanya del Mig (medio) y posteriormente al famoso Casamanya Sud (sur). Con esto, completamos uno de los picos más emblemáticos del país, uno de ellos dentro del reto de los 100 Cims y el otro dentro del pequeño reto de los "estripagecs" (desafío local).
Quince años después, vuelvo a disfrutar de este mirador excepcional en el corazón de Andorra, entre Ordino y Canillo, con vistas de 360º sobre todo el país, rodeados de nubes bajas que daban un toque muy especial al paisaje.
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